Y pasa el tiempo, el que no demora
en granos de arena su constancia,
el de las hojas caducas sembrando mi cielo,
el de azúcar y amargo caramelo.
Pero todo prescribe en tierra seca,
ruda de nostalgias, acosada de anhelos,
de esperanzas encontradas, y otras;
desechadas por oxidados anzuelos.
en granos de arena su constancia,
el de las hojas caducas sembrando mi cielo,
el de azúcar y amargo caramelo.
Pero todo prescribe en tierra seca,
ruda de nostalgias, acosada de anhelos,
de esperanzas encontradas, y otras;
desechadas por oxidados anzuelos.