Potro salvaje trotando en mis venas
suelta las monturas de tu bravío
que ni dormir me dejas
que quiero descansar como río.
Mis suspiros por una serena calma
queriendo encontrar el reposo
que no lo abrazo ni cuando llega el alba,
ni en recuerdo, ni en despojo.
Detén el sainete de composturas,
de entresijos y algarabías.
Que la noche ayuda
pero no lo suficiente.
Temblando como guirnalda de rosas
la aurora me recibe y el día me acoge.
Sólo el reposo y la distensión
me tejerán para peinar tu crin.
El querer disfrutar de los míos
en la más henchida plenitud,
¿no es deseo justificado
y derecho concebido?
Porque no vivo en mí
sino tiemblo de ti,
sin llegar a comprender
el motivo de este baile
Porque quiero desmontar
de tan agría cabalgadura
y no logro retener las riendas
de la vida que es mía.
suelta las monturas de tu bravío
que ni dormir me dejas
que quiero descansar como río.
Mis suspiros por una serena calma
queriendo encontrar el reposo
que no lo abrazo ni cuando llega el alba,
ni en recuerdo, ni en despojo.
Detén el sainete de composturas,
de entresijos y algarabías.
Que la noche ayuda
pero no lo suficiente.
Temblando como guirnalda de rosas
la aurora me recibe y el día me acoge.
Sólo el reposo y la distensión
me tejerán para peinar tu crin.
El querer disfrutar de los míos
en la más henchida plenitud,
¿no es deseo justificado
y derecho concebido?
Porque no vivo en mí
sino tiemblo de ti,
sin llegar a comprender
el motivo de este baile
Porque quiero desmontar
de tan agría cabalgadura
y no logro retener las riendas
de la vida que es mía.