29 de septiembre de 2012

desbocado


 Potro salvaje trotando en mis venas
suelta las monturas de tu bravío
que ni dormir me dejas
que quiero descansar como río.

Mis suspiros por una serena calma
queriendo encontrar el reposo
que no lo abrazo ni cuando llega el alba,
ni en recuerdo, ni en despojo.

Detén el sainete de composturas,
de entresijos y algarabías.
Que la noche ayuda
pero no lo suficiente.

Temblando como guirnalda de rosas
la aurora me recibe y el día me acoge.
Sólo el reposo y la distensión
me tejerán para peinar tu crin.

El querer disfrutar de los míos
en la más henchida plenitud,
¿no es deseo justificado
y derecho concebido?

Porque no vivo en mí
sino tiemblo de ti,
sin llegar a comprender
el motivo de este baile

Porque quiero desmontar
de tan agría cabalgadura
y no logro retener las riendas
de la vida que es mía.

14 de septiembre de 2012

conjugación perfecta

 

He aquí la conjugación perfecta de música y letra que el tiempo no es capaz de destruir...

Acaricia mi ensueño
El suave murmullo
De tu suspirar.
Como ríe la vida
Si tus ojos negros
Me quieren mirar.
Y si es mío el amparo
De tu risa leve
Que es como un cantar,
Ella aquieta mi herida,
Todo, todo se olvida.

El día que me quieras
La rosa que engalana,
Se vestirá de fiesta
Con su mejor color.
Y al viento las campanas
Dirán que ya eres mía,
Y locas las fontanas
Se contarán su amor.

La noche que me quieras
Desde el azul del cielo,
Las estrellas celosas
Nos mirarán pasar.
Y un rayo misterioso
Hará nido en tu pelo,
Luciernagas curiosas que verán
Que eres mi consuelo.

El día que me quieras
No habrá más que armonía.
Será clara la aurora
Y alegre el manantial.
Traerá quieta la brisa
Rumor de melodía.
Y nos darán las fuentes
Su canto de cristal.

El día que me quieras
Endulzará sus cuerdas
El pájaro cantor.
Florecerá la vida
No existirá el dolor.

La noche que me quieras...

Carlos Gardel